La firma finlandesa salió rápidamente a respaldar su acuerdo comercial con Microsoft Windows Phone, luego que una ola de rumores sobre una búsqueda laboral sugiriera un cambio de rumbo hacia la plataforma móvil de Google.

“Es hora de acabar con esos rumores”, escribió tajante Doug Dawson, encargado de relaciones públicas de Nokia, en su cuenta de Twitter. En un segundo posteo le dio contexto al aviso de búsqueda de personal que despertó dudas sobre la continuidad del acuerdo comercial entre el fabricante europeo y Microsoft.

“El trabajo que publicamos recientemente está relacionado con el soporte de nuestros HERE Maps para otras plataformas, incluyendo iOS y Android”, contó el ejecutivo.

A finales de la semana pasada, Nokia publicó un aviso en LinkedIn buscando a un ingeniero de software especializado en Linux para encarar proyectos relacionados a nuevos productos. El texto redactado por el personal de Recursos Humanos de Nokia llevó a la especulación sobre un cambio de dirección en la estrategia de la firma finlandesa.

Desde principios de 2011, Nokia está ligada comercialmente a Microsoft, honrando un acuerdo para utilizar Windows Phone en todos sus smartphones. Lamentablemente para la firma dirigida por Stephen Elop, la sociedad no ha traído mayores satisfacciones a Nokia, que sigue perdiendo mercado en todo el mundo a manos de dispositivos Android como los de Samsung y el iPhone de Apple.

Pensar en un cambio de dirección no es algo que nazca desde afuera. El mismo Risto Siilasmaa, presidente del directorio de Nokia, había revelado a principios de año que su firma ya cuenta con un “Plan B” si la alianza con Microsoft no trae los resultados esperados.

¿Será Android ese Plan B? No necesariamente. Si bien Samsung se convirtió en el fabricante de móviles más vendedor del mundo gracias a su numerosa línea de equipos basados en Android, otras firmas como HTC, Motorola y LG están luchando para imponerse en un mercado saturado de celulares con el sistema operativo de código abierto desarrollado por Google. Intentar diferenciarse del resto cuando la oferta es tan alta, puede ser un reto tan difícil como innecesario para Nokia, una firma que supo liderar el mercado con plataformas propias, como Symbian.

Sin embargo, a dos años del acuerdo con Microsoft, es hora que Nokia se anime a hacer un balance serio y tome una decisión antes de que los consumidores empiecen a olvidarse de la marca, encandilados por otras ofertas. Seguramente, el rendimiento de los nuevos integrantes de la familia Lumia, ya basados en Windows Phone 8, durante las ventas de fin de año tendrá mucho que ver en el futuro inmediato de Nokia. ¿Habrá que recurrir al Plan B?

Fuente: dattatecblog.com