La popularidad de los servidores Linux ha incrementado las necesidades de los clientes de Microsoft para que las dos tecnologías trabajen juntas.

Microsoft y Novell planean realizar un acuerdo que permitiría al software de código libre Linux trabajar con Windows de Microsoft, según informó una fuente cerca a la situación.

El acuerdo marca un cambio en el curso de Microsoft, que ha pasado años tratando de derrotar al software de código libre. La creciente popularidad de los servidores Linux ha incrementado las necesidades de los clientes de Microsoft para que las dos tecnologías trabajen juntas.

La fuente dijo bajo la condición del anonimato que Microsoft planeaba anunciar la colaboración en una conferencia de prensa del presidente ejecutivo de Microsoft, Steve Ballmer, y el presidente ejecutivo de Novell, Ron Hovsepian.

Contrariamente a los software de usuarios privados, el software de código libre permite a los desarrolladores compartir códigos y sumar funciones. Los usuarios pagan por características personalizadas, mantenimiento y soporte técnico. Linux es la variante más popular de los software de código libre.

Un informe anterior publicado en el sitio de internet del Wall Street Journal sobre que Microsoft respaldaría el producto Linux de Novell impulsó una subida de las acciones de Novell del 19 por ciento, mientras que las del rival de código libre Red Hat cayeron un 2 por ciento.

"Linux ha crecido", dijo Katherine Egbert, un analista de Jefferies & Co., que cubre Red Hat y Novell.

"Meterse en Linux proveyendo soporte y tecnología que pueda hacer funcionar a Linux en Windows y viceversa muestra que Linux es un mercado importante", añadió.

Novell y Microsoft planean trabajar junto para desarrollar tecnologías que permitan a los usuarios operar tanto Windows como Suse Linux, una versión del sistema operativo vendido por Novell, dijo la fuente.

Las dos empresas, en algún momento salvajes rivales, planean también proveer cobertura de patentes para los clientes de ambos en sus respectivos productos, dijo la fuente.

Fuente: Reuters